Síguenos en redes sociales:

La actividad laboral podría estar detrás de hasta el 15% del asma diagnosticado

Neumólogos piden coordinación en el abordaje de las dolencias ocupacionales

La actividad laboral podría estar detrás de hasta el 15% del asma diagnosticadoJ.M. Martínez

bilbao. Si conocer la etiología de cualquier enfermedad resulta ser siempre fundamental para enfrentarse a ella con eficacia, en el caso del asma, además de las derivas estrictamente sanitarias existen otras muy reseñables, especialmente si se llega a determinar su origen laboral ocupacional; porque de demostrarse esta causalidad, se estaría ante su tipificación como enfermedad laboral con sus consecuencias legales sobre declaración de incapacidad e indemnización correspondiente.

Existen numerosas sustancias inorgánicas -naturales como sílice, carbón, caolín, talco? o artificiales como lana de escoria, lana de roca, lana de fibra de vidrio, asbesto?- que inhaladas pueden afectar al tracto respiratorio de forma gradada desde leve a grave, y muchas de las cuales pueden encontrarse en mayor proporción en actividades ocupacionales concretas, por ejemplo en minas o canteras de granito, con lo que ello supone de causalidad en la aparición de enfermedades respiratorias.

"No todas las enfermedades ocupacionales respiratorias resultan mortales". Este es uno de los mensajes que la Sociedad Vasco-Navarra de Patología Respiratoria (SVNPAR) quiere trasladar a los pacientes que padecen alguna de estas dolencias. Neumólogos de esta sociedad científica, reunidos este fin de semana en Donostia, han debatido, entre otros temas, sobre el tratamiento de estas dolencias que, en su opinión, requieren de mayor coordinación entre las diferentes instituciones y un planteamiento multidisciplinar.

Una de las mayores dificultades de determinación de causalidad está en la larga fase prodrómica de estas enfermedades que se pueden desarrollar y manifestar entre diez y treinta años después de haber realizado una actividad ocupacional de riesgo; es precisamente esta larga fase latente el mayor obstáculo para su determinación como asma ligado a la actividad laboral.

Los neumólogos de la SVNPAR destacan la elevada incidencia de estas dolencias en la población. Según sus datos, entre las dolencias respiratorias, el asma de origen ocupacional supone entre un 9 y un 15% del total del diagnosticado en adultos.

Por este motivo, en el encuentro, los expertos han puesto sobre la mesa la realidad a la que se tienen que enfrentar a diario en el manejo de estas enfermedades respiratorias ocupacionales. "Hemos incidido en la necesidad de una mayor coordinación entre las instituciones implicadas: Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales (Osalan) y el INSS para valorar la incapacidad o determinar indemnizaciones económicas", explica a DEIA Mikel Oribe, neumólogo del hospital de Galdakao y coordinador-moderador de la mesa redonda sobre estas patologías.

En estas patologías lo primero es establecer si existe una relación causal entre el entorno de trabajo y la aparición de la dolencia. "Para la confirmación e inclusión de una de ellas como patología laboral se tiene que demostrar una incidencia de esta enfermedad entre los trabajadores superior al resto de la población; además se ha de identificar una clara relación causa-efecto entre las condiciones de trabajo y la enfermedad, aspecto que muchas veces resulta problemático", afirma Oribe, Una opinión compartida por la especialista Begoñe Salinas del Hospital Universitario de Basurto.

sin datos certeros Como reconocen los especialistas, no se dispone de cifras exactas sobre la prevalencia de estas patologías. "Las variaciones geográficas, los diferentes grados de exposición, así como la existencia de sustancias inorgánicas y elementos químicos potenciales de desarrollar la enfermedad, han dado lugar a estudios epidemiológicos con datos muy dispares".

A pesar de ello, lo que sí pueden afirmar los neumólogos, a tenor de la evidencia científica que manejan, "es que el asma ocupacional es una de las patologías respiratorias más frecuentes en nuestro hábitat". Esta alta incidencia se debe a que existen más de 300 agentes naturales y químicos capaces de inducir este tipo de asma tras una exposición prolongada", explican Oribe y Salinas.

En su práctica clínica diaria, los neumólogos se encuentran, además, con la neumoconiosis, enfermedad originada por la inhalación crónica de partículas inorgánicas y que recibe una denominación específica en función del agente causal, carbón -neumoconiosis por carbón- sílice -neumoconiosis por inhalación de sílice-. Esta última también es conocida como silicosis y se presenta en un 18% de los trabajadores de canteras de granito".

"Las enfermedades por exposición a asbesto son también frecuentes y, aunque no disponemos de guías de prevalencia e incidencia, sabemos que hay al menos 300 ocupaciones laborales que pueden verse afectadas por ello ya que estos minerales se encuentran en más de 3.000 productos. Estas patologías presentan un periodo latente que varía entre 10 y 30 años, por lo que se estima que en los próximos años nos encontraremos con un pico epidemiológico de estas patologías, entre las que se encuentran el derrame pleural, asbestosis (neumoconiosis por inhalación de asbesto) y cáncer de pulmón, alerta Oribe, para quien las Jornadas de la SVNPAR han tenido como leitmotiv "intercambiar ideas para detectar las áreas de mejora que nos permitan una mejor coordinación de los diferentes profesionales e instituciones implicados".